La gente puede hacer cosas absurdas en nombre del amor y los empresarios no son inmunes a cometer este tipo de error. El objeto del afecto no tiene que ser el cónyuge; puede ser ese otro ser querido en la vida, conocido como la “idea de negocio”. Amar un negocio a muerte es más común de lo que la mayoría de gente cree.
Hace poco descubrí un libro publicado en 2002 llamado A Good Hard Kick In the A**: Basic Training For Entrepreneurs (Una buena patada en el c…: Entrenamiento básico para empresarios) escrito por Rob Adams. Al momento de escribir el libro, Adams era fundador y director general de AV Labs, un acelerador/fondo de apoyo a empresas. Antes de eso, ocupó varios puestos ejecutivos en varias empresas líderes en tecnología. Actualmente, forma parte de la facultad de MBA de la Universidad de Texas en Austin y trabaja en varios cargos en diferentes empresas.
Adams va directo al grano cuando habla de todos los errores que los empresarios cometen que finalmente pueden matar lo que, de otro modo, podría haber sido una empresa exitosa. Un punto que me pareció particularmente revelador es el amorío que muchos empresarios tienen con sus ideas.
Adams afirma que no invierte en una idea o empresa en la que el empresario está enamorado de su idea. Me sorprendió un poco leer esto; mi reacción inicial fue que uno busca a alguien que vive y respira su idea las 24 horas del día, durante los 7 días de la semana y lo único que busca es el éxito de su negocio. Pero luego me di cuenta de que amar es otra cosa.
Cuando un empresario está enamorado de su idea, suceden varias cosas peligrosas.
En primer lugar, se centra en la idea misma.
Esto significa que muchas veces no está pensando en otras áreas del negocio que son vitales para su éxito como el reclutamiento, las operaciones, la gestión de flujo de caja y las estrategias de mitigación de riesgos. La idea se convierte en algo que lo abarca todo y lo consume como un adicto que no puede pensar en nada más que la próxima dosis. Esto evita que una gran idea se convierta en una gran empresa.